El uso de las nuevas tecnologías es parte ya de nuestra vida diaria y fruto de ello, cada día nacen nuevos productos y servicios ofrecidos a través de medios tecnológicos (por ejemplo, aplicaciones móviles). El problema de dichos productos y servicios es que son creados con una finalidad concreta y con un objetivo económico claro y pocas veces, mientras se diseña y crea el producto o servicio, se piensa en cómo, una vez terminado, va a afectar dicho proyecto a la privacidad del usuario que lo utilice, es decir, cómo se va a proteger la intimidad del usuario que utilice el producto.
Y es aquí, cuando nace el término o el concepto «la privacidad desde el diseño«, la idea de que el diseño del producto o servicio que vamos a crear debe tener en cuenta, desde un principio, la protección de la privacidad del usuario. En caso contrario, nos encontramos que una vez terminado el proyecto no somos capaces de encajar su diseño (ya terminado) con el cumplimiento de la normativa de protección de datos.
Para evaluar si nuestro producto o servicio cumple con «la privacidad desde el diseño» podemos utilizar varias herramientas, una de ellas son las Evaluaciones de Impacto en la Privacidad o en la Protección de Datos.

¿Qué es la cesión de datos personales?
Facebook es, actualmente, la red social más importante del mundo con casi 1.300 millones de usuarios en activo. Esta red social, conocida por todos y creada por Mark Zuckerberg, nunca ha dejado de ser polémica por el uso que hace de los datos personales e imágenes de sus usuarios.
El problema que tienen en la mayoría de casos los acuerdos de desarrollo de Software o programa informático es que, habitualmente, se inician entre dos empresas o amigos de forma que, ambas partes confían en el buen hacer de la otra parte y por ese motivo, o bien no existe contrato entre ellas y lo que encontramos es un presupuesto y muchos correos electrónicos cruzados, o bien, en el mejor de los casos, existe un contrato de desarrollo de Software amplío que no establece, entre otras, qué pasa si una de las partes incumple o si el Software que se entrega no sirve para aquello para lo que fue encargado, es decir, no cumple el objetivo de lo que realmente se necesita.